La mayoría de
nosotros quiere cambiar el mundo, pero sólo unos pocos estamos dispuestos a
cambiar nuestra propia mente. La Curación por la
Actitud se basa en la creencia de que no son las
personas ni las condiciones externas a nosotros mismos las que nos causan
pesar.
No somos víctimas
del mundo que nos rodea. Son nuestros
pensamientos y actitudes respecto de la gente y de los acontecimientos los
que nos causan conflictos y aflicción.
Lo que es más, no sólo somos responsables
de nuestros propios pensamientos sino que también somos
responsables de los sentimientos que experimentamos y explorando estos
sentimientos podemos llegar a remediarlos.
A continuación, los doce principios
de la Curación por la Actitud, inspirados en Un Curso de
Milagros:
La esencia
de nuestro ser es el amor.
La salud
reside en tener paz interior; la curación consiste en librarse del
miedo.
Dar y
recibir son la misma cosa.
Podemos desprendernos del pasado y del futuro.
El único
momento que hay es ahora, y cada instante es para dar.
Podemos
aprender a amarnos a nosotros mismos y a los demás a través de perdonar
en lugar de juzgar.
Podemos
aprender a encontrar amor en lugar de encontrar defectos.
Podemos
decidirnos y encaminarnos a tener paz interior independientemente de lo que
esté sucediendo en el exterior.
Todos somos
discípulos y maestros unos de otros.
Podemos
concentrarnos en la totalidad de la vida y no sólo en los
fragmentos.
Puesto que
el amor es eterno, la muerte no debe darnos miedo.
Podemos considerar que nosotros y los demás estamos
siempre ya sea brindando amor o bien pidiendo
ayuda.
Una niña canadiense llamada
Kaycee
Poirier, de diez años, rescribió poco antes de morir de un tumor cerebral, éstos
principios en un lenguaje adecuado para los niños manifestando:
-Éste es mi regalo para otros niños que están luchando por
vivir.
¡El amor es una de las cosas más
importantes de la vida!
Es importante mejorar, por eso, ¡ no
debemos dejar que nos atrape el miedo !.
Dar y recibir son la misma
cosa.
No vivas en el pasado y no vivas en el
futuro.
Haz lo que puedas ahora. Cada minuto es
para dar amor.
Podemos aprender a querernos a nosotros
mismo y a los demás por la vía de perdonar en lugar de no perdonar. Ejemplo:
pelear.
Podemos encontrar amor en lugar de
defectos.
Si hay algún problema afuera, no te
desesperes, porque adentro estás seguro.
Todos somos alumnos y maestros unos
para otros.
No te fijes sólo en las cosas malas, ¡
fíjate también en las cosas buenas !.
Como el amor es para siempre, la muerte
no tiene por qué darnos miedo.
Siempre podemos ver a los demás como
personas que están dando amor o pidiendo ayuda.
Centro de Curación por la Actitud
Cuando yo era
joven, me propuse cambiar el mundo. Al crecer un poco más, me percaté de que
esto era demasiado ambicioso, por lo que me propuse cambiar mi país. Me di
cuenta al hacerme mayor de que también era demasiado ambicioso, de modo que me
propuse cambiar mi ciudad. Cuando advertí que no podría hacer ni siquiera esto, traté de cambiar a mi familia. Ahora que soy viejo, sé que debería haber
comenzado por cambiar yo mismo. Si hubiera empezado por mí mismo, tal vez habría
conseguido cambiar a mi familia, mi ciudad o aún el país y quién sabe, ¡quizás incluso el mundo!
Palabras de un
rabino jasídico en su lecho de muerte
Una mala actitud
es una de las principales causas del fracaso. Adoptar una actitud equivocada,
nos puede inducir a cometer errores aunque todo lo demás esté bien hecho. Sin
embargo, con una actitud correcta, aunque el resto esté equivocado, se puede
alcanzar el éxito.Podemos construir
el éxito a través de la actitud y no la actitud a través del éxito. Es de gran
significado que el Creador le otorgara al hombre el control de poder delinear
sus propios pensamientos, y que los mismos puedan calzar en el molde que él
escoja. Una actitud mental positiva es el punto de partida de todas las
riquezas.
Mary Kay
Ash
La actitud
es más importante que el pasado, que la educación, que el dinero, que las
circunstancias, que lo que la gente hace o dice. Es más importante que la
apariencia, el talento o la habilidad. Lo asombroso es que todos los días
tenemos una elección relativa a la actitud que adoptaremos ese día. No podemos
cambiar nuestro pasado. No podemos cambiar el hecho de que la gente actúa de
cierta manera. No podemos cambiar lo inevitable. Lo único que podemos cambiar
es jugar con el hilo del que pendemos, y ésa es nuestra actitud.
Charles
Swindoll
Curar es
vivir la vida como una oración y aceptar que esto nos provoca un estado natural
de alegría pura, de paz y de amor.