TODO LO QUE NOS IRRITA DE LOS DEMÁS |
Para este ejercicio, necesitas una hoja de papel y una pluma.
Piensa en una persona que te resulte atractiva. En el lado izquierdo del papel haz una lista de diez o más características positivas de esa persona. Anota todo lo que se te ocurra. Escribe rápidamente. El secreto está en no darle tiempo a tu mente consciente para que edite tus pensamientos.
¿Por qué te gusta esa persona? ¿Porqué la encuentras atractiva? ¿Qué admiras en ella? ¿Es una persona amable, afectuosa, flexible, independiente? ¿Admiras que maneje su auto hermoso, que luzca un peinado favorecedor, que viva en una casa bonita? Sólo tú vas a ver esa lista; sé completamente honesto.
Ahora trae a tu conciencia a alguien que te resulte repulsivo, alguien que te moleste, te irrite, te exaspere o te incomode en alguna forma. Empieza a definir las características específicas que te parecen poco atractivas.
En el lado derecho del papel, elabora una lista de diez o más de estos rasgos indeseables. ¿Por qué te molesta esa persona? ¿Por qué te molesta o enfurece? Escribe tantas características como quieras, pero no te detengas antes de diez.
Cuando hayas terminado ambas listas, piensa de nuevo en la persona que te parece atractiva e identifica al menos tres características poco atractivas de ella.
No rechaces esta idea; nadie es perfecto ya que mientras más puedas aprender a aceptar esto en los demás, más dispuesto estarás a hacerlo en ti. Luego piensa en la persona que te parece poco atractiva e identifica tres rasgos que sean relativamente interesantes.
Ahora debes tener, al menos, 26 características escritas en el papel. Léelas todas y encierra en un círculo las que puedas reconocer en ti. Por ejemplo, si escribiste «compasivo» para la persona atractiva, pregúntate si alguna vez has actuado con compasión.
Si es así, encierra esa palabra. No lo pienses demasiado; responde con lo primero que se te ocurra. Haz esto con todas las palabras de la lista; encierra las que describan un rasgo que puedas identificar en tu propia naturaleza.
Lee la lista otra vez. Entre las palabras que no encerraste, encuentra las que definitivamente no te puedes aplicar, las que no te describen en absoluto. Señálalas con una palomita.
Por último, entre las palabras encerradas en un círculo, identifica las tres que mejor te describan. Da vuelta a la hoja y escribe esas tres palabras. Luego vuelve a las palabras palomeadas e identifica las tres que menos te describan, las que por ninguna circunstancia se te pueden aplicar.
Escribe estas tres palabras atrás de la hoja, debajo de las tres que mejor te describen. Lee esas seis palabras; las tres que mejor te describen y las tres que menos se te aplican. Tú tienes todos estos rasgos y características.
Las características que niegas con mayor energía también son parte de ti, y probablemente son las que provocan más turbulencias en tu vida. Atraes a las personas que tienen estas seis características, las más positivas porque tal vez sientas que no las mereces, y las más negativas porque te rehúsas a reconocer su presencia en tu vida.
Deepak Chopra
Observa con cuidado las ocasiones en que te encuentres emitiendo críticas sobre las personas que te rodean ya que las mismas reflejan lo que piensas de ti. Acostúmbrate a ver el lado bueno de todas las personas ya que estarás viendo tu lado bueno y generoso como ser humano. De igual manera, no olvides que cuando otras personas emiten críticas sobre ti, en realidad las hacen sobre ellos mismos. Sé compasivo y piensa que ellos lo ignoran ya que no poseen el nivel espiritual superior que tú tienes.
Elias Benzadon
Para comprender a otro ser humano debes ser capaz de percibir las condiciones que le impulsaron a ser como es.
Margaret Bourke-White