SIN AMOR NADA TIENE VALOR

 

 

 

Hay muchísimas maravillas alrededor nuestro que esperan ser descubiertas, que esperan nuestro interés, a nuestra atención y no vemos nada. Porque nuestro corazón no está presente en lo que ven nuestros ojos, porque no estamos interesados, porque no nos gusta lo que vemos cada día. Si miras a alguien a quien quieres, si miras a la flores, a las mariposas y a los pájaros, porque los encuentras bonitos, siempre ves mucho más de lo que sólo pueden ver tus ojos. Es así, como descubres diariamente nuevas maravillas.

 

El que quiera dar alegría a la gente debe tener alegría dentro de sí. El que quiera dar calor al mundo debe llevar fuego dentro de sí. El que quiera ayudar a la gente debe tener la mano suave para no herirla. El que quiera traer paz debe haberla encontrado primero en su propio corazón.

La gente necesita silencio pero el progreso le da ruido. La gente necesita bondad pero el progreso exige dura competencia. La gente necesita a Dios pero el progreso le da dinero.

Para poder vivir, primero debemos poder disfrutar. Disfrutar tranquilamente. Para poder disfrutar debes estar libre, libre de celos, libre de odio y venganza, libre de cualquier pasión que divida tu interior y lo destruya. Si sabes disfrutar, sabrás reírte y alegrarte. Entonces estarás agradecido por el hecho de que el sol se levante cada día para ti. Entonces encontrarás personas amables y a través de cada sonrisa vendrá hacia ti la amistad de Dios, a través de cada flor, cada palabra bonita, cada mano, cada abrazo. Si puedes disfrutar tranquilamente de las cosas pequeñas, no hay duda de que vives en un jardín lleno de gloria.

El hombre no es consciente de las cosas más simples y esenciales de su existencia. Sólo sabe lo importante que es el aire fresco, cuando está a punto de asfixiarse, y lo maravilloso que es poder respirar, cuando se muere. Solo debes querer verlo. Debes dejar entrar en ti cada momento, y disfrutarlo. Admirando en silencio lo que ves y oyes. Disfrutar de cada momento insustituible sin tener nunca lo suficiente. Esa es la alegría de las cosas pequeñas: ¡La llave para ser siempre y en cualquier lugar un poco feliz!

La felicidad consta de tantas partes que en algún lugar siempre falta una. Resulta desesperante cuando las personas se aferran durante toda su vida obstinadamente, a esa única parte que no está. He sido profundamente feliz durante muchos días porque he estado encantado con las cosas pequeñas, las cosas simples.

Acoge cada momento en tu interior y disfrútalo. Admira en silencio lo que ves y vives. Vive conscientemente y se agradecido. Cuando la gente busca la felicidad casi siempre busca dinero. Pensamos que el dinero da felicidad, hasta que la experiencia enseña lo contrario, y entonces casi siempre es demasiado tarde.

Hay personas que siempre llevan consigo sus preocupaciones siempre y por todas partes. No pueden disfrutar, no sólo tienen el corazón lleno de sus preocupaciones sino también los ojos. Vean lo que vean, sólo ven sus preocupaciones. Oigan lo que oigan, sólo oyen sus preocupaciones.

Mucha gente se considera a sí mismo muy importante, mucho más de lo que son. Siempre y por todas partes buscan los focos. Seríamos muchos más felices si, liberados de nosotros mismos nos liberáramos también de esa enfermiza ansiedad de nuestra propia grandeza imaginaria. Sólo entonces podremos vivir verdaderamente y descubrir a la persona de al lado. Sólo entonces nos podrá fascinar la vida de alguien, que tal vez hace mucho tiempo nos espera.

Casi siempre sufres más del miedo mismo que de lo que tienes miedo. El miedo gasta una cantidad enorme de energía y agota a la persona. El miedo te pone enfermo, El miedo paraliza hoy las fuerzas que mañana necesitarás, para poder enfrentar la catástrofe que temes.

Sólo hay un camino hacia el prójimo: el camino del corazón. Todos los demás caminos son desvíos. Sólo el corazón tiene entrada al misterio que es el hombre. La verdadera imagen de las personas está marcada por el signo del amor. El amor que nos dice que cada persona vale la pena, que cada persona debe ser amada.

Cuanto más penetro en la naturaleza, tanto más atentamente miro a la flor más pequeña y veo mariposas e insectos jugar alrededor de las hierbas fragantes, tanto más creo en un milagro increíble. Voy de una sorpresa a otra y estoy profundamente convencido de que aquí se nos ofrece un pequeño trozo de paraíso. Pero, si veo lo que ocurre en el mundo tengo miedo, mucho miedo, porque la gente es capaz de hacer de un paraíso una cloaca.

Hay personas que ya no creen en el Sol, una vez que se hace de noche. Les falta ese poquito de paciencia para esperar hasta que amanezca.

Una persona feliz no espera más de la vida de lo que la vida pueda dar. No hace caso a los muchos problemas que hunden a otras personas. Una persona feliz disfruta de los días que recibe. El que espera y exige demasiado atrae a las nubes oscuras y crea sus propios días difíciles.

Ser fiel no es un arte cuando todo marcha sobre ruedas. La fidelidad se demuestra cuando todos abandonan.

Si dos personas se aman y quieren que su amor se mantenga firme deben elegir la misma dirección e ir por el mismo camino. Porque únicamente así podrán acercarse más el uno al otro. El que cree que para quererse hay que agarrarse el uno al otro durante todo el día no sabe realmente lo que es el amor.

El amor es una fuerza, si es amor verdadero, una fuerza que te hace capaz de vencerte a ti mismo para el bien del otro. Si eres fiel en el amor, no tienes nada que perder, ni siquiera si debes atravesar un túnel oscuro. Si no eres fiel en el amor quizás encuentres una satisfacción temporal, pero al final lo pierdes todo.

La relación sexual no es fundamental para el amor, sino que el amor es fundamental para la relación sexual.

Sólo tienes una vida. Haz de ella lo que puedas. Hay días oscuros y días de luz. Haz de ella lo que puedas. Sólo tienes una. Inténtalo con esa vida. Si rechazas esa vida ya no tienes otra.

La noche no puede ser tan oscura que no encuentres ni una pequeña estrella. El desierto no puede ser tan desconsolador que no encuentres ningún pequeño oasis. Hay flores que crecen en el invierno. En algún lugar siempre nos queda alguna alegría que se nos da.

El amor es la finalidad de la vida. El que vive para otra cosa siempre saldrá perdiendo. El hombre pasa toda su vida en busca de un hogar. ¡Sólo el amor es una casa para vivir eternamente! 

Hay muchas cosas sobre las que no es necesario hablar sino que sólo hay que hacerlas. El corazón, en las relaciones humanas, no se puede sustituir por nada. Al final, sin amor nada tiene valor.

Phil Bosmans

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