La vida es
afectada por lo que existe en nuestra mente; uno de los principios más
importantes sobre la mente es que siempre gravitamos alrededor de lo que
pensamos. Piensa en algo y hacia ello te dirigirás. Aun si piensas en algo
que no deseas, hacia te encaminarás. Esto se debe a que tu mente se aproxima
a las cosas, no retrocedes con respecto a ellas.
Tu mente no puede
moverse en sentido negativo con respecto a lo que se desea. Estar
conscientes de estar forma de operar de la mente nos hace más cuidadosos en
cuanto a lo que decimos a los demás y en cuanto a lo que nos decimos a
nosotros mismos.
Tu mente funciona
con márgenes. Cuando piensas que no quieres olvidar un objeto, en tu mente
se forma la imagen de que vas a olvidarlo. Aunque digas que no quieres tal
cosa, tu mente sigue operando en función de la imagen. Cuando dices que
quieres acordarte de un objeto, te formas una imagen mental de ti mismo
recordando la acción que tienes que llevar a cabo.
Tu mente
sencillamente no opera, y no puede operar, en función del reverso de una
idea. Muchos padres frustrados podrían mejorar su situación empleando un
lenguaje que evoque imágenes del resultado deseado en la mente de sus hijos.
El pensamiento
positivo realmente funciona porque quienes lo invocan tienen en mente lo que
quieren. Por consiguiente gravitan necesariamente hacia sus metas. Siempre
debes pensar en lo que deseas.
Obtenemos lo que
nuestro subconsciente cree que podemos lograr. Tu mente es como un iceberg;
tú estás más consciente de la parte visible, pero la de mayor peso es la
porción oculta. Todos tus pensamientos conscientes contribuyen a formación
de tu subconsciente. El subconsciente abarca el total de pensamientos
conscientes que has generado hasta la fecha, y los resultados que has
obtenido en tu vida son producto de lo que en ella has depositado.
Tus programas
subconscientes son los responsables de tus éxitos y tus fracasos. Más aún,
no importa si lo que tu subconsciente cree ser cierto lo es en realidad. Los
resultados que obtengas se apegarán a lo que tus programas internos
«decidan».
El
subconsciente es milagroso para resolver problemas. No es fácil tratar de
entender plenamente el funcionamiento de la mente, ¡sobre todo teniendo en
cuenta que el cerebro humano es la máquina más compleja conocida por el
hombre!
Todos los días
creas programas nuevos en tu subconsciente por medio de tus pensamientos.
¡Así que ten cuidado con lo que piensas! Utiliza tu mente como lo hacen las
personas con éxito. Establece metas en tu subconsciente como si ya las
hubieras alcanzado.
Si deseas ser una
persona segura de sí misma, por medio de tu imaginación creativa visualízate
resplandeciendo de seguridad todo el tiempo. Observa la meta como si ya la
hubieras alcanzado y tu mente interior se encargará de producir el resultado
final.
Si deseas
prosperar económicamente, visualiza todo el tiempo el resultado ideal.
Piensa que ya disfrutas del éxito y de la prosperidad que deseas, y tu
subconsciente hará el resto. Este principio opera de manera invariable e
infalible.
Mucha gente se
obstina en exigir explicaciones lógicas, tratando de entender su
funcionamiento, mientras que sus vecinos aprovechan estas leyes de la mente
para tornarse saludables, prósperos y felices. Si funciona, aprovéchalo.
Después preocúpate por entenderlo.
La mayor parte
de nuestro aprendizaje ocurre en los seis primeros años de vida; así de
grande es nuestra habilidad para absorber cosas nuevas en esos años de
infancia. También durante esa época nuestra imaginación es más fértil.
El segundo punto
explica el primero. Necesitamos de una gran imaginación para aprender rápida
y fácilmente. Por lo tanto, tenemos que mantener un saludable respeto por la
imaginación creativa y, de hecho, estimularla y desarrollarla en la edad
adulta.
La imaginación es
la clave para todo aprendizaje y para la solución de los problemas. La
imaginación también es importante para la memoria. He aquí una razón por la
cual la gente de edad avanzada suele tener mala memoria: han permitido que
su imaginación se deteriore a tal grado, que ya no crean imágenes, y por
tanto su mente no puede aprobarlas.
Siempre que
archivamos información en nuestros bancos de memoria, empleamos la
imaginación y la fuerza de la visualización para formar una imagen. La
efectividad con que creamos la imagen determina cuán fácilmente podemos
evocar otra vez dicha información.
La imaginación es
esencial para relajar el cuerpo y la mente. Si eres capaz de sentirte
inmerso en un escenario creado por tu imaginación, podrás relajarte a
voluntad. Por el contrario, a alguien que no posea una imaginación tan
desarrollada le será más difícil relajarse.
Ejercite la
imaginación en la misma forma que ejercite el cuerpo. Mientras más la
desarrolles, más fácilmente resolverás problemas y recordarás las cosas.
Debemos valorar
nuestra imaginación, nuestra capacidad de soñar, ya que los soñadores han
sido quienes más han logrado desde el principio de la historia. Combinando
esfuerzo con aspiraciones lograron contribuciones sin par. Si jamás tienes
un sueño, jamás un sueño se te hará realidad.
Practicar
actividades con la imaginación produce resultados extraordinarios. La manera
más rápida de mejorar cualquier habilidad es combinar un entrenamiento
físico constante con un entrenamiento mental constante. El gran valor del
ensayo mental es que puedes crear en tus neuronas patrones de acción
perfectos. En tu imaginación no cometes errores.
De aquí se
desprende que si constantemente imaginamos los resultados que deseamos,
¡éstos serán los que obtendremos! Mucha gente vive así toda la vida,
¡pensando en aquello que más teme y preguntándose por qué siempre les
sucede! Intenta perfeccionar tus habilidades por medio de la imaginación;
antes de poner manos a la obra dedica un poco de tiempo y visualízala
mentalmente. Las personas más exitosas del mundo lo hacen ¡Úneteles!
Por lo general
recibimos lo que esperamos de la vida. Aquel que se queja que la gente
siempre lo ignora, que lo trata mal, se aprovecha de él, será maltratado por
la vida. Quien piensa que la gente siempre lo trata bien, recibe buen trato.
Nosotros estamos
al mando. Tú decides lo que piensas. Tú decides qué poner en tu mente y, por
tanto, determinas lo que recibes a cambio. Intenta conocer personas
realmente felices. ¡No es fácil hallarlas! Trata de encontrar personas que
vivan vidas miserables y anhelen que la vida se torne maravillosa. Tampoco
se las encuentra fácilmente. La vida nos depara, en buena medida, lo que de
ella esperamos.
Andrew Matthews
Así como la
mente consciente es la fuente del pensamiento, el subconsciente es la fuente
del poder.
Claude Bristol
Fui a visitar a
un niño de ocho años llamado Billy, que tenía leucemia. La medicación para
el dolor que le habían recetado los médicos a Billy no parecía estar dando
resultado, y le dolían mucho las piernas. Le pedí
a Billy que me hablara de sus experiencias más felices, y me contó que lo
que más le gustaba hacer era esquiar y jugar en la nieve. Le pregunté:
-¿Qué pasaría si pusieras nieve sobre tus
piernas?.
Me respondió:
-Las piernas se me enfriarían y se volverían
insensibles.
-¿Tienes bastante imaginación?,
-le pregunté.
-Sí, -me contestó.
Le indiqué
entonces que cerrara los ojos. Le di algunas instrucciones para activar la
imaginación. Hice que imaginara que estaba jugando en la nieve y poniendo
nieve sobre sus piernas para adormecerlas y no sentir más dolor. En unos
cinco minutos, una gran sonrisa le iluminó el rostro y Billy me dijo que el
dolor había desaparecido. Billy fue un gran
maestro para mí, pues me mostró cómo podemos crear pensamientos en nuestra
mente para reducir el dolor físico.
Dr. Gerald
Jampolsky