TODO LO QUE
VIENE A TU VIDA |
Todo lo que viene a tu vida
no es sino la manifestación material de alguna creencia en tu propia mente. Para
cualquier cosa que desees en tu vida, debes aportar un equivalente mental.
Suminístrate a ti mismo un equivalente mental y las cosas vendrán a ti. Sin un
equivalente mental las cosas no pueden venir. En cuanto a las cosas en tu vida
que quisieras que se disolvieran, si liberamos de nuestra mente su equivalente
mental, estas tienen que desaparecer.
Todo lo que ves o sientes en el plano material, es
la expresión de un equivalente mental sostenido por ti. El secreto de una vida
de éxito está en edificar el equivalente mental de lo que deseas; y deshacerte,
expulsar, el equivalente mental de lo que no deseas.
El equivalente mental se edifica pensando pausada,
constante y persistentemente en la clase de cosas que anhelas, y pensando así
tienes dos valores: claridad e interés. Si deseas construir algo en tu vida,
forma el equivalente mental de lo que quieres pensando mucho sobre tal cosa,
pensando claramente y con sumo interés.
Cada cosa es producida por el efecto de otras dos.
Todo lo que se produce en el universo entero es el efecto de dos cosas. Esta es
la ley de la polaridad. Así es como el mundo material se edifica: siempre se
necesitan dos cosas para producir una tercera.
Para levantar el pensamiento las dos polaridades
son la claridad del pensamiento y el calor de la emoción; el conocimiento y el
sentimiento. Piensa en lo que quieras que te suceda; piénsalo, siéntelo y ponle
todo tu entusiasmo e interés. Lo que llamamos sentimiento en conexión con el
pensamiento es en realidad interés y entusiasmo.
Sentimiento no es excitación. El verdadero
sentimiento en el pensar es provechoso. Usted edifica el equivalente mental de
lo que quiere interesándose en él. Ésta es la forma de crear sentimientos.
La única forma de expulsar un equivalente mental
equivocado es suministrando lo contrario. Piensa lo correcto. El pensamiento
correcto automáticamente extirpa el pensamiento erróneo. No te apropies de cosas
negativas, sustitúyelas, suplántalas, con cosas positivas y constructivas.
Si empiezas en este mismo día a rehusar pensar en
tus errores, y por supuesto esto incluye los errores de los demás; si dejas de
pensar en errores y mantienes en cambio los conceptos reales; si dejas de pensar
en temor y piensas en cambio en Amor Divino; si cesaras de pensar en escasez y
en su lugar pensaras en la prosperidad y en la presencia de la abundancia de
Dios; y si entonces pensaras con la debida claridad y le pones interés, estás
edificando un equivalente mental de felicidad y prosperidad.
Si tu pensamiento es muy vago no edificas un
equivalente mental. Si tu pensamiento carece de interés, no edificas un
equivalente mental. Así, haz tu pensamiento tan claro como sea posible. Nunca
luches. Tan pronto asumes la actitud de que vas a lograr lo que quieres, que lo
vas a conseguir aunque te cueste la vida, toda edificación mental se estanca.
Piensa lo que deseas tan claro como te sea
posible: sé definido pero no seas muy específico. No luches por aclarar tus
ideas. Para obtener el equivalente mental tal vez necesites algún tiempo.
Llénalo de interés, como si fuera una carga eléctrica, o se muere. La única
forma es con amor. No te puede interesar algo si no lo quieres. Si lo amas, está
lleno de interés, lleno de energía y vida, y se vuelve real.
Si deseas cambiar alguna condición en tu vida,
deberás cambiar tu manera de pensar sobre la misma y mantenerte en el cambio.
Entonces la condición cambiará de acuerdo. Cambiar de manera de pensar y
mantener el cambio es la forma de edificar un equivalente mental; este es el
secreto del logro.
Ya tienes el equivalente mental de todo lo que hay
en tu vida hoy; y deberás destruir esos moldes de lo que no deseas más y así
desaparecerán de tu vida. Deberás hacer un molde nuevo o un equivalente mental
de lo que deseas ver manifestado en tu vida.
Si deseas salud, cesa de pensar en enfermedad y
miedo; debes hacer el hábito de pensar en salud y armonía. No hay enfermedad a
menos que exista el temor. Nada te puede afectar adversamente si no fuera por el
miedo que le tienes. Cada quien tiene muchos miedos en el subconsciente de los
cuales no está consciente, pero ellos trabajan de igual forma.
El secreto de la armonía y el éxito está en
concentrar tus pensamientos en la armonía y el éxito. La atención es la llave de
la vida; aquello en lo que pones tu atención y te concentras, se manifiesta en
tu vida, porque tú estás edificando un equivalente mental.
Debe dársele rienda suelta a varios pensamientos a
entrar a su mente, uno naturalmente, llevando al otro, pero todos deben ser
positivos, constructivos, armoniosos, encaminados a tu deseo, y debes pensar con
serenidad y sin esfuerzo. Entonces obtendrás el equivalente mental del éxito y
el éxito se demostrará; éxito, salud, relaciones sociales, en tu trabajo, en tu
desarrollo espiritual.
Por algún tiempo encontrarás que tus pensamientos
continúan durmiendo en el viejo molde. Tal es la fuerza del hábito. Pero si
persistes calladamente, ganarás la victoria. Es siempre un poco difícil cambiar
un hábito, pero se puede hacer, y luego el hábito correcto se establece y
resulta más fácil que el viejo, y así se edifica el nuevo equivalente mental.
Cambia tu mente y mantén el cambio. No hables del
asunto negativo, ni actúes como si existiera. Actúa como si en verdad la nueva
situación ya estuviera presente. Si lo haces la nueva condición aparece en lo
externo, porque lo externo no es sino la proyección de lo interno.
Emmet Fox
Tuve problemas, señor, pero ya no
porque ellos han sido arrastrados
ellos han sido arrastrados
Y tengo pecados, señor, pero ya no
porque ellos han sido borrados
ellos han sido borrados
Y tengo amigos, señor, pero ya no
porque ellos se han ido
ellos están lejos
Señor, he estado llorando solo
he estado llorando solo
no, no más lágrimas a solas
no, no más lágrimas aquí
Nosotros estamos solos, señor, pero
ya no
porque no hemos sido arrastrados
todavía
no hemos sido arrastrados todavía
Tuve problemas, señor, pero ya no
porque ellos han sido arrastrados
porque ellos ya no están.
Joe Purdy «Wash Away»
Tuve un sueño del cual informé a mis
superiores. Les dije que tenía tres centavos y un sueño de Dios para que
construyera un orfelinato. Ellos con gentileza me contestaron que no se puede
construir un orfelinato con tres centavos, con esa cantidad no se puede hacer
nada. Yo les contesté que ya lo sabía pero que con Dios y tres centavos podía
hacer algo.
Madre Teresa de Calcuta
Aquel que quiera aprender a volar un
día, primero debe aprender a pararse, a caminar, a correr, a escalar y a bailar;
no se puede volar volando.
Friedrich Nietzsche
Soñar con algo para hacerlo bien, es
correcto; pero soñar en algo cuando debería estarlo haciendo, está mal.
Oswald Chambers
Sueña sueños encumbrados, y al soñar,
así serás. Tu visión es la promesa de lo que un día serás; tu ideal es la
profecía de lo que al final mostrarás ser.
James Allen
Todos los que han logrado grandes
cosas han tenido un gran propósito, han fijado su mira en un objetivo de gran
altura, de tanta que incluso a veces pareció imposible.
Orison Swett Marden
Ser feliz requiere de un gran cuota
de coraje, pues generalmente significa arriesgarse a dejar la seguridad de
nuestro mundo, de ese lugar en el que todo es familiar, que nos permite mantener
nuestras emociones y hasta nuestras preocupaciones bajo control, para
sumergirnos en situaciones nunca antes experimentadas o aventuradas las cuales,
aunque sean efímeras, siempre valen la pena porque nos recuerdan que estamos
vivos verdaderamente. Sin embargo, no todos tenemos esa valentía, esa fuerza
interna o capacidad de empuje para decidirnos a ir tras nuestros sueños, porque
le tememos a la realidad y sobre todo a chocar contra ella. Es por esto que a
veces, como enviados divinos, llegan en nuestro rescate personas que nos
entusiasman a dejar nuestros miedos para intentar en ocasiones lo que en algún
momento consideramos imposible: atrevernos a cambiar, a enfrentar lo que sea, a
realizar nuestras propias y pequeñas hazañas para conseguir lo que anhelamos.
Pero, ¿cómo lo logran? ¿cómo hacen que desaparezcan las dudas y nos sintamos
audaces, fuertes y capaces de todo? La respuesta es simple, valiéndose de un
ingrediente infalible: el amor.
Annie Suárez
Un Alma se encontró con un ángel y le
preguntó:
-¿Por
qué senda llegaré antes al cielo: por la senda del conocimiento o por la
senda del amor?.
El ángel la miró con extrañeza y
respondió:
-¿Acaso
no son las dos una?.
Olive Schreiner
Querida Jan: Ayer cuando hacíamos el
amor, faltaba algo. No estaban los muros. No estaba la reserva. No había
intento, ni deseo de complacer. Éramos un presente el uno para el otro. No había
dar ni recibir, ni yin ni yang, ni macho ni hembra. Sólo el abandono de nuestra
temible obstinación. Algo nos movía, dejando vacíos los espacios separados que
solemos defender. Misteriosamente, tu yo y mi yo desaparecieron. Cuerpos
inspirados se disolvieron en fluidos de gracia. Juntos en la dulce nada. Y
luego, nosotros Uno, volvimos a ser dos otra vez.
Sam Keen
No hay mayor poder en el Universo que
el poder del amor. El sentimiento del amor es la frecuencia más elevada que
puedes emitir. Si pudieras envolver todos tus pensamientos con amor, si pudieras
amar a todas las personas y cosas de la misma manera, tu vida se transformaría.
Rhonda Byrne
-Creo que llega un momento cuando un
hombre comienza a preguntarse si quiere una vida feliz o una vida con
significado.
-Me gustaría tener ambas.
-Eso no puede ser. Son dos caminos
muy diferentes. Quiero decir, para ser verdaderamente feliz, un hombre debe
vivir completamente en el presente. Sin pensar en lo que pasó ni en lo que
pasará. Pero para una vida con significado un hombre está condenado a olvidar el
pasado y obsesionarse con el futuro.
Malcolm McDowell
«Héroes»
Es necesario vivir con ilusión,
buscar en la vida todo lo que pueda parecernos positivo, dentro de nosotros
mismos o en nuestro entorno. Hay que agarrarse a la ilusión por vivir, en
especial cuando se producen problemas en nuestra vida, a nivel personal,
familiar, profesional o al que fuere, y no depende exclusivamente de nosotros el
resolverlos. Hay que abrir las alas y pasar por encima de ellos, porque
lamentarnos de los mismos sólo sirve para agrandarlos y ponernos en respuesta
biológica negativa, con todas sus consecuencias para la salud y para la vida.
Busca todo lo que pueda ilusionarte en la vida. Lo esencial en el hombre es el
poder creador -de bien y de mal- de su pensamiento. Vivimos de acuerdo con
nuestros pensamientos. Los pensamientos son las manos del alma que modelan la
vida del hombre. Hemos aprendido a hablar con lujo de detalles del mal, ¿y del
bien? En cambio lo que hay que hacer es justo lo contrario: hablar sólo del bien
que necesitamos. Y cuando tenemos o tememos algún mal hay que aprender a
encontrar el bien opuesto y pensar que eso es lo que necesitamos. ¿Te suena la
palabra «imposible»? Cada vez que la usas te estás autolimitando, estás cerrando
la puerta a nuevas soluciones para los problemas de cada día. Hay que potenciar
la Medicina Preventiva, que tendrá su fundamento en un mejor conocimiento de la
influencia del pensamiento en la calidad de vida y en la salud. Cada pensamiento
de un ser humano sale de él y no hay barrera que lo pare, ni distancia que no
pueda salvar. Cada pensamiento llega al inconsciente de todo ser humano, y como
desgraciadamente se piensa y se habla tanto de males, estamos llenando el
inconsciente de cada ser humano de negatividad, de tinieblas. Si queremos que
nuestra civilización tenga una salida positiva hay que cambiar la motivación
fundamental de los actos humanos, que es el temor, por amor. El hombre y nuestra
sociedad son el reflejo de sus pensamientos. El bien no tiene límite y el mal no
tiene futuro
Dr. Angel Escudero
La combinación del pensamiento y el
amor es lo que crea la irresistible fuerza de la ley de la atracción. El
principio que infunde al pensamiento el poder de correlacionarse con su objeto,
y por ende de controlar toda experiencia humana adversa, es la ley de la
atracción, que es otro nombre para el amor. Éste es un principio eterno y
fundamental inherente en todas las cosas, en todo sistema filosófico, en toda
religión y ciencia. No hay escapatoria de la ley del amor. Es el sentimiento el
que da vitalidad al pensamiento. El sentimiento es deseo y el deseo es amor. El
pensamiento impregnado de amor es invencible.
Charles Haanel