Todos
hablan de libertad. Pero ¿qué es la libertad? ¿somos realmente libres?
¿somos libres para ser quienes realmente somos? La respuesta es no, no somos
libres. La verdadera libertad está relacionada con el espíritu humano: es la
libertad de ser quienes realmente somos.
¿Quién nos
impide ser libres? Nosotros mismos. Tenemos recuerdos de tiempos pasados en
lo que éramos libres y disfrutábamos de ello, pero hemos olvidado lo que
verdaderamente significa la libertad.
Si observamos
a un niño pequeño, descubrimos a un ser humano libre. ¿Por qué lo es? Porque
hace lo que quiere hacer. Y si observamos a estos seres humanos de dos años
de edad, descubrimos que la mayor parte del tiempo sonríen y se divierten.
Exploran el
mundo. No les da miedo jugar. Sienten miedo cuando se hacen daño, cuando
tienen hambre y cuando algunas de sus necesidades no se ven satisfechas;
pero no les preocupa el pasado, no les importa el futuro y sólo viven el
momento presente.
Los niños muy
pequeños no tienen miedo de expresar lo que sienten. Son tan afectuosos que,
si perciben amor, se funden en él. No les da miedo el amor. De niños, no le
tenemos miedo al futuro ni nos avergonzamos del pasado. Nuestra tendencia
natural es disfrutar de la vida, jugar, explorar, ser felices, amar.
Tu verdadero
yo es todavía un niño pequeño que nunca creció. En ocasiones, cuando te
diviertes o juegas, cuando te sientes feliz, cuando pintas, escribes poesía
o tocas el piano, cuando te expresas de cualquier otro modo, ese niño
pequeño reaparece.
Estos son los
momentos más felices de tu vida: cuando surge tu yo verdadero, cuando no te
importa el pasado y no te preocupas por el futuro. Entonces eres como un
niño.
La
libertad que buscamos es la ser nosotros mismos, la de expresarnos tal como
somos. Sin embargo, si observamos nuestra vida, veremos que, en lugar de
vivir par complacernos a nosotros mismos, la mayor parte del tiempo sólo
hacemos cosas para complacer a los demás, para que nos acepten.
La mayoría de
la gente ni siquiera se da cuenta de que no es libre. Algo en su interior se
lo susurra, pero no lo comprende, y no sabe por qué no es libre. El primer
paso hacia la libertad personal consiste en ser conscientes de cuál es el
problema para resolverlo porque hasta que no seas consciente no podrás hacer
ningún cambio.
Tal vez
no podamos escapar del destino del ser humano, pero podemos elegir entre
sufrir nuestro destino o disfrutar de él, entre sufrir o amar y ser feliz,
entre vivir en el infierno o vivir en el cielo.
Mi elección personal es vivir en el cielo.
Dr. Miguel Ruiz
Cuando tú
encuentres el camino otros te encontrarán a ti.
Al pasar por el camino serás atraídos hasta
tu puerta
y el camino que no puede oírse resonará en
tu voz, y el camino que no puede verse
se reflejará en tus ojos.
Lao-Tsé
Donde hay un
gran amor hay siempre milagros. Los milagros no se apoyan tanto en los
rostros, las voces o los poderes curativos que nos llegan de lejos como en
el refinamiento de nuestra percepción, que hace que, por un momento,
nuestros ojos puedan ver y nuestros oídos oír lo que está siempre ahí a
nuestro alrededor.
Willa Cather
Todo cuanto
contemplas, aunque parezca estar Fuera,
está Dentro, en tu Imaginación, de la que
esta Vida Finita
es tan sólo una Sombra.
William Blake
El amor es lo
más importante de la vida. Pero, ¿qué queremos decir cuando decimos «amor»?
Desde luego, no es amor amar a alguien porque esta persona te ama a su vez.
Amar es sentir un inmenso cariño sin pedir nada a cambio. Podemos ser muy
inteligentes, podemos aprobar todos los exámenes, doctorarnos y alcanzar una
alta posición, pero si carecemos de esta sensibilidad, de este sentimiento
de simple amor, nuestro corazón estará vacío y seremos desdichados durante
el resto de nuestra vida.
Jiddu Krishnamurti
Olvida lo que
era la vida, tú eres lo que decidas ser, la vida será lo que tú
veas.
Sea lo que sea que creas que tienes, no tienes nada que perder. A
través de todo lo vivo y lo muerto, el tiempo corre como una mecha;
y la mecha arde, y la tierra gira. Aunque los años dejen paso a la
incertidumbre,
y el miedo de vivir por nada ahogue la voluntad, hay una parte mía que
le habla a mi corazón. Aunque a veces es difícil verla, nunca está
lejos de mí.
Jackson Browne
«The Fuse»
Cuando actúo
bien, me siento bien. Cuando actúo mal, me siento mal. Y ésa es mi religión.
Abraham Lincoln
Lo que la gente
piense de mí es problema de ellos, no mío. Nunca me he preocupado por lo que
digan los críticos; si me preocupara por lo que ellos dicen, seguiría
sentado en la India.
Deepak Chopra
El ir lejos en
la vida depende de que se sea tierno con los jóvenes, compasivo con los
ancianos, solidario con los luchadores y tolerante con los débiles y los
fuertes. Porque en algún momento de tu vida habrás sido todo eso.
Georges
Washington Carver
Saber que
sabemos lo que sabemos y que ignoramos lo que no sabemos es el mejor
conocimiento.